La educación inclusiva: estrategia clave para reducir la brecha social

Con la participación de más de 300 estudiantes de Licenciatura en Educación Infantil se celebró el cuarto encuentro de prácticas pedagógicas.

Como una apuesta de formación integral que espera proyectarse en los territorios educativos, se realizó en la sede San camilo el pasado 16 de julio el 4° Encuentro de Prácticas “Transformaciones pedagógicas desde las prácticas inclusivas”, convocado por el programa de Licenciatura en Educación Infantil.

La jornada contó con expertos invitados, entre ellos, Sandra Patricia Rodríguez Vargas, licenciada en educación especial de la Universidad Pedagógica y asesora en procesos de inclusión en primera infancia; Nancy Johanna Alonso Neira, fonoaudióloga de la Universidad Nacional de Colombia y magíster en educación con énfasis en matemática de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas; Nasly Carolina Molano Díaz, especialista en pedagogía de la enseñanza de la lectoescritura y las matemáticas de la Universidad Externado de Colombia y en lengua de señas; Sandra Milena Barrera, especialista en pedagógica y docencia del Área Andina; Mónica Paola Morales Barriga, educadora especial, los licenciados Miguel Ángel Aragón y Piedad Sánchez Tejada,  y Flor Alba Lopera Zuleta, profesional de la Secretaría Distrital de la Mujer y creadora de la estrategia Tejiendo Mundos de Igualdad con Niñas y Niños.

El encuentro que se desarrolló a través de estaciones lúdicas, conversatorios y espacios de cuentería, permitió evidenciar las prácticas inclusivas como un recurso que favorece los procesos de aprendizaje en las aulas de clase, resaltando la importancia de fomentar una participación responsable de toda la comunidad educativa en él.

Estudiantes y expertos coincidieron en señalar que la educación inclusiva es un factor esencial para potenciar el desarrollo social, cultural y económico, favoreciendo la vinculación de personas en condición diferencial desde la perspectiva de capacidades y la eliminación de barreras. Así mismo, reconociendo el proceso de transformación de conocimientos, métodos, modelos y recursos que permiten fortalecer la praxis, entendiendo la educación como derecho fundamental con calidad y en equiparación de oportunidades.